Chile se enfrenta en la actualidad a grandes desafíos asociados a su modelo de desarrollo. Además de compartir problemáticas globales, como el cambio climático, el país experimenta una gran inequidad en distintas dimensiones como educación o salud.
En este contexto, el Comité InnovaChile de Corfo ha identificado la innovación social como una alternativa para el desarrollo sostenible (impacto económico, social y medioambiental). Implica un mejoramiento sustantivo, esto es, que la solución propuesta sea más eficiente y efectiva que las soluciones existentes en el territorio región determinados, y que consideren las dimensiones económica, social y medioambiental.
La innovación Social es también un proceso en el que se busca la colaboración entre diferentes actores, especialmente la participación activa de la comunidad objetivo. Asimismo, debe ser sustentable, replicable y escalable.
Desde las regiones chilenas, la innovación social se va visualizando como una alternativa concreta para abordar sus problemáticas sociales, y como un espacio que convoca a construir las soluciones desde el territorio, conectándose con las otras regiones del país y con el mundo. Se trata de una solución novedosa en el contexto de una localidad específica.
Nicolas Monge, coordinador de la Unidad de Innovación Social en Corfo, ha presentado en el Curso de Verano Sumsic 2018, el concepto de Innovación Social como un cambio de paradigma donde los actores locales son los protagonistas de su propio desarrollo. En este marco, también explicó la importancia de generar políticas que fomenten este nuevo modelo de desarrollo exponiendo algunos ejemplos de política pública como el propio caso de la Corporación de Fomento de la Producción (CORFO) del Gobierno chileno, quienes desde 2015 han venido desarrollando un programa para la solución de desafíos regionales a través del co-financiamiento de proyectos innovadores, rescatando la identidad local y generando ecosistemas de Innovación Social.
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