La edición especial 2020 de la serie The Global Competitiveness Report (GCR) del Foro Económico Mundial se publica en un momento histórico muy difícil e incierto.
El estallido de la pandemia COVID-19 no solo ha provocado una crisis de salud mundial y una profunda recesión económica, más seria que la acontecida durante la crisis financiera de 2008-2009, sino que también ha creado un clima de profunda incertidumbre sobre las perspectivas futuras.
Las principales conclusiones del informe se resumen a continuación:
- Reactivación y transformación de un entorno propicio: Los gobiernos deberían priorizar la mejora de la capacidad de pensamiento a largo plazo, digitalización de los servicios públicos, incorporar principios de gobernanza sólidos, recuperar la confianza pública al servir a sus ciudadanos, preparar medidas de apoyo para los países de renta baja muy endeudados, y planificar el futuro desapalancamiento de la deuda pública.
- Reactivación y transformación del capital humano: Los países deberían centrarse en ampliar los programas de reciclaje profesional, mejorar las cualificaciones de los trabajadores, repensar las políticas activas del mercado laboral, actualizar los planes de estudios educativos, repensar las leyes laborales para la nueva economía y utilizar nuevas tecnologías de gestión del talento para adaptarse a las nuevas necesidades de la fuerza laboral.
- Reactivación y transformación de los mercados: Los países deberían priorizar el refuerzo de la estabilidad de los mercados financieros, dirigir los recursos financieros hacia inversiones a largo plazo, fortalecer la estabilidad mientras se continúa expandiendo la inclusión, y lograr un equilibrio entre las medidas continuas para apoyar a las empresas y prevenir la consolidación excesiva de la industria con suficiente flexibilidad para evitar mantener las “empresas zombis” en el sistema.
- Reactivación y transformación del ecosistema de innovación: La tecnología se ha retrasado especialmente en la capacidad de ofrecer soluciones al consumo de energía, las emisiones y satisfacer la demanda de servicios sociales inclusivos. Para gestionar estas complejidades, los países deberían ampliar las inversiones públicas y privadas en I+D para promover la difusión de las tecnologías existentes que apoyan la creación de nuevas empresas y el empleo en los “mercados del mañana”.
Puedes consultar el infome (en inglés) aquí:
https://www.weforum.org/reports/the-global-competitiveness-report-2020